En las alturas de Huixquilucan, Estado de México, a 3,190 metros sobre el nivel del mar, nace nuestro destilado de pulque que honra la historia y transforma
la tradición.
Nuestra destilería se encuentra rodeada por un majestuoso sembradío de más de 30,000 plantas de agave salmiana —una variedad noble y silvestre, profundamente enraizada en la tierra y la cultura del Altiplano Central.
Aquí, donde la altitud extrema y el clima desafiante dan carácter a cada planta, destilamos el pulque como nunca antes: respetando el legado ancestral, pero con la visión de llevarlo más allá de sus fronteras.
Nuestro proceso combina el conocimiento heredado con técnicas contemporáneas, dando como resultado un destilado puro, complejo y auténtico, que rinde homenaje al espíritu del maguey.
Este es un lugar donde la tierra, el tiempo y la tradición se encuentran.